| Descripción |
Este brocal de pozo de estilo neoático, representa en relieve la de escena de Jasón consultando a la Pitia en presencia de Apolo.
En torno a un trípode se mueven una serie de figuras. A la derecha camina Apolo tañendo una lira. Calza sandalias, viste un chitón largo, con mangas. Sobre los hombros, dos grandes broches o fíbulas sostenían un gran manto, al que pertenecen tanto los pliegues que caen en cascada por detrás de la figura como los que se aprecian por delante. El tocado del dios consiste en un peinado con moño por detrás, un pequeño bucle abombado sobre la frente, y unos "rizos líbicos" (uno por cada lado) que le caen, desde detrás de las orejas, sobre los hombros. También se aprecia una cinta o diadema en torno a la cabeza muy desgastada. Apolo sujeta el instrumento sobre su costado derecho, usando la mano izquierda para pulsar las cuerdas y la diestra para apagar las notas.
Precediendo en su marcha al dios, camina la Pitia. Es una joven descalza, vestida con chitón e himation. El chitón es largo y con mangas cortas. El himation rodea su cuerpo. La cabeza, pese a su corrosión, parece llevar un tocado parecido al de Apolo, con su moño por detrás y dos trenzas o bucles cayendo sobre cada hombro. Porta dos atributos: con su mano derecha, sostiene ante ella una rama de laurel; con su mano izquierda, sujeta oblicuamente una larga vara.
Ante la Pitia llegan dos consultantes. El primero de ellos es un hombre joven que se nos presenta en tres cuartos por la espalda. Calza botas de media caña (embades o endrómides) y lleva una clámide enrollada en torno al cuello y, finalmente, un pequeño casco que apenas llega a cubrir, con su forma redondeada, el cuero cabelludo. De su acompañante sólo quedan restos de una pierna y la parte delantera de su cabeza.
La escena representa el momento en que Jasón y un compañero consultan el oráculo de Delfos para saber si su empresa, la expedición de los Argonautas y la recuperación del vellocino de oro, tendrá éxito.
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